Capturando el Milagro del Nacimiento: Fotografía de Partos
No hay experiencia en la vida que se compare con el nacimiento de una persona. Observar el nacimiento de un bebé es una frase que puede decirse con rapidez, pero cuando se comprende el significado profundo detrás de esas palabras, su valor es incalculable. Estar presente en ese momento es el regalo más grande que puedo recibir como fotógrafa, doula y ser humano.
Desde el año 2018, he tenido el honor de acompañar a varias familias en uno de los momentos más trascendentales de sus vidas: el nacimiento de sus hijos e hijas. Estos trabajos son de una naturaleza excepcionalmente delicada y requieren habilidades que trascienden la mera manipulación de una cámara.
Afortunadamente, cuento con una red de profesionales del campo de la maternidad que me han guiado y apoyado a lo largo de este emocionante trayecto. Reconozco que la fotografía de partos no es una práctica común, no porque no sea un tesoro de recuerdos invaluables para las familias, sino porque nuestra percepción actual del proceso de parto (gritos, sangre, miedo y dolor) choca con la imagen estereotipada de una sesión fotográfica (pajaritos cantando, sonrisas y poses).
Esta divergencia ha sido mi motivación desde el principio, trascendiendo la idea del mero recuerdo. Al igual que en el caso de la lactancia, mi perspectiva como DOULA está profundamente arraigada aquí. Mis imágenes buscan transmitir la posibilidad de un parto respetado y natural. Intento revivir la creencia en nosotras mismas, en nuestros cuerpos, y recuperar la sabiduría que nuestras antepasadas heredaron.
En el pasado, era normal estar presente en los partos de las hermanas menores, primas y amigas, rodeadas de mujeres familiares y parteras. Es posible que la abuela haya nacido en su hogar y quizás no lo sepamos. He recibido mensajes de mujeres que agradecen mi trabajo en partos, diciendo “ver estas imágenes me ayudó a comprender qué esperar y a visualizarlo mejor”. Ese es el propósito; ya que, debido a que hemos “desaprendido” muchas cosas (nuestra fisiología, el proceso del parto, el poder de las hormonas,…), ahora nos corresponde a las mujeres “aprender” de nuevo. De esta manera, las generaciones futuras simplemente volverán a “absorberlo”.
Por supuesto, hay situaciones en las que, a pesar de nuestra intención de un parto natural, la naturaleza tiene su plan y el nacimiento ocurre mediante una cesárea. Y eso también es perfectamente válido. Las cesáreas necesarias son un testimonio de maravilla y salvamento de vidas.
Es fundamental que, si algo de lo que has leído aquí resuena contigo y deseas informarte más, te pongas en contacto con quienes pueden brindarte orientación. Hay innumerables talleres disponibles para prepararte de manera consciente para el parto, tanto en línea como presenciales aquí en Gran Canaria. Si te sientes inclinada a ello, no dudes en contactarme y estaré encantada de proporcionarte diversas opciones.
Y ahora, te pregunto a ti: ¿Sientes el deseo de preservar un recuerdo como este?
Comunícate conmigo a través de WhatsApp al 606 58 28 19, y exploremos juntos cómo puedo ayudarte a capturar este momento extraordinario.